Aquí les dejo...

27 de marzo de 2011

Y bien, llegó el momento de salir a la calle y ver que el día está frio pero no me siento solo, aunque su cuerpo y risas ya no me acompañan. Camino tranquilo, no se me pasa por la cabeza ni la típica pregunta de la mañana ¿cómo habrá dormido?, al contrario, pienso en los caminantes de esa calle y ve en sus caras alegría y preocupación, pero de igual forma, siguen su camino, como  en este momento lo estoy haciendo yo.

Aquí les dejo a mi demonios y la prueba de que existieron y que se presentaron en este espacio, pero hasta acá me acompañaron y tuvieron voz. ¿Regresaré a este espacio?, sí, seguramente a leerlos y recordarlos, pero con la sonrisa en los labios.

Gracias,

Nos vemos en http://semeocurriodecirlo.blogspot.com/

Yo no sé...

18 de enero de 2011


El instinto de reducción llega al fracaso, todo pierde el sentido estricto de la palabra y al final niego el peligro que se avecina. No tengo un rostro que mostrar, no tengo un nombre que pronunciar, todo está en la reconstrucción de un pasado que seduce el presente.