hum...

2 de abril de 2010

Sonrío y bebo mis lágrimas, como un vino frágil. ¿Quieres entender mi alma?, no, mi vacio te confunde, todo se reduce a palabras sin sentido y prolongados silencios. Aquí solo reina el engaño, de mí hacia ellos y de ellos hacia mí, no hay verdad completa en esta pena que palidece poco a poco.

La demencia… me castiga, el dolor… es un acto sádico como la vida que pretendo llevar y construir paso a paso. No sé que quieras entender, no sé que desees comprender, pero no hay más que un vacio inquietante y un culto macabro a la muerte.

Por consiguiente, el caos interior me ha llevado a drenar mis lágrimas. No tengo nada que confesar, solo busco algo en que creer… pero hay tanto de mí aquí, que el hastío rompe con la noche que entre mortajas de mi cuerpo, se alimenta del dolor de mis recuerdos.

No sé que quieras, no lo sé, por lo tanto, aquí me despido…


0 Delatores: